EL ACERO
Creado por el hombre hace 3000 años, representa uno de los materiales de mayor importancia de la era contemporánea.
La tecnología ha permitido crear una variedad de aceros que son utilizados en diferentes obras, siendo el acero inoxidable uno de los logros más importantes.
Por ser inmune a la corrosión y al envejecimiento, es ideal para la fabricación de productos que por sus características y aplicaciones requieren un máximo nivel de salubridad.
Así, es utilizado en la industria láctea, vitivinícola, alimenticia, aeronáutica, naval, quirúrgica, química, etc.
Las ventajas del acero inoxidable:
El acero inoxidable es inmune al sarro y a la corrosión, por ello garantiza el máximo nivel de salubridad.
Las instalaciones de acero inoxidable no contienen la toxicidad propia de las instalaciones tradicionales fabricadas en plomo, cobre, o que requieran soldaduras, pegamentos o fusiones.
Los accesorios de acero inoxidable no necesitan aislación ni protección anticorrosiva, ya que no es atacable por cales, cemento u otros materiales, tampoco es permeable al aire, ni afectado por rayos ultravioletas, pudiéndose reciclar en un 100%